Mes: febrero 2018

  • Era atleta

    Era atleta. Velocista. Los cien metros lisos. Pasó toda su juventud entrenando concienzudamente. Siempre le faltaron unas centésimas para clasificarse y poder disputar así los campeonatos nacionales. Los años se le echaron encima y tuvo que dejar las pistas. Se metió a relojero. Por fin le pudo a las centésimas, y aun a las milésimas.

  • Decidió dedicarse a la cultura

    Decidió dedicarse a la cultura. Pero lo suyo era la beligerancia y el activismo. Por eso acabó dedicándose al culturismo.

  • Un día dejó de comer

    Un día dejó de comer y empezó a nutrirse de interrogantes. Estos se fueron instalando en la cabeza, y la cabeza creció. Mucho. Tanto, que se convirtió en un cefalópodo. Ahora tiene atrofiados los pies de no usarlos -era muy trabajoso caminar con tanto interrogante a cuestas-, y la gente juega con su cabeza dándole puntapiés;…

  • Alfonso Zapatero no solo no quería tener fin

    Alfonso Zapatero no solo no quería tener fin, sino ni tan siquiera principio. Pero se olvidó de su humana condición: las iniciales de su nombre y apellido le traicionaron.