decir
-¿Podría decirme a qué hora pasa el tren?
-No lo sé…
-Parece Ud. apesadumbrado.
-Lo estoy. Y aunque Ud. Sea un desconocido para mí, quiero confesarle la causa de mi pesar: me pesa la memoria.
-¿Cómo?
-Que lo recuerdo todo, absolutamente todo, y eso es una cruz.
-Ud. es un farsante. La semana pasada le pregunté la hora, y ahora no me ha reconocido.
-Le he dicho que lo recuerdo todo, pero Ud. está fuera del todo.
-¿Qué quiere decir?
-Que Ud. no es nada. Y la nada no merece atención alguna.
-Oye, ¿es cierto lo que me han dicho?
-¿Qué te han dicho?
-Que al cambiarte de piso, te llevaste hasta los tabiques.
-Lo es. Es normal que cuando está de mudanzas se lleve sus pertenencias.
-¡Pero los tabiques forman parte del inmueble!
-No hay más inmueble que el solar. Toda creación humana es mueble.