Etiqueta: mundo
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Te veo muy acongojado
-Te veo muy acongojado. -Es que tengo un problema terrible. -¿Y cuál es? -No ceso de tener regüeldos, que me obligan a hacer constantes pausas cuando hablo. -¡Bah! Tu problema es de muy fácil solución: convierte los regüeldos en eructos estentóreos. Así, todo el mundo se alejará de ti consternado y no tendrás que hablar…
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¿Qué haces ante esta tumba?
-¿Qué haces ante esta tumba? ¿Rezas? -No. Maldigo al muerto. -¿Y eso? -Se fue al otro mundo debiéndome mil euros. -¡Hombre! ¿Y no puedes perdonárselos? -Le perdono el dinero, no los oropeles.
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Me fascina
-Me fascina el mundo de la imagen. -¿Entonces por qué te dedicas a la radio? -Porque la radiofonía es una fuente inagotable de imágenes virtuales.
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Quería aparentar
Quería aparentar un optimismo desbordante. Aseguraba a todo el mundo que gracias a su insomnio se había librado de comprarse un despertador. Sus ojeras lo desmentían.
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Hastiado de la civilización
Hastiado de la civilización, decidió cortar con ella. Se fue a vivir a una cueva perdida de una perdida sierra. Por la noches, la radio le mantenía informado de cuanto sucedía en el mundo.
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Tenía una extraordinaria fuerza
Tenía una extraordinaria fuerza. Tenía una extraordinaria inteligencia. Tenía una extraordinaria belleza. Todo ello innato. No tuvo capacidad ni voluntad suficiente para adaptarse a este mundo tan imperfecto.